Hace unos pocos días estuve viendo la otrora famosa película de terror “El proyectode la Bruja de Blair” (1999), pelotazo en su día y que supuestamente marcó un hito como regeneradora del cine de terror. Como ya pasó con clásicos como “Holocausto Caníbal” (1980), la promoción fue tan o más importante que lo que luego fue la película. Planteadas ambas como si fueran un documental, los directores esperaban que la audiencia viera estos filmes como auténticos documentales reales y, por lo tanto, con altas dosis de probabilidad de que los hechos narrados pudieran pasarnos a cualquiera.
Lo que os comentaba de la promoción es muy importante, porque
en el caso de “Holocausto Caníbal” se llegó a obligar a los actores a no presentarse en el estreno de
la cinta porque supuestamente habían sido devorados en el Amazonas. En el caso
de “El proyecto…”, la viralidad en Internet fue crucial. La red de redes sirvió así como
un motor enorme para movilizar una campaña publicitaria muy efectiva. Lo que se
vendía no era una película de terror bien realizada o una superproducción de
Hollywood, no, lo que se exponía era un documento real rodado en “amateur” por tres
jóvenes estudiantes.
“El proyecto de la Bruja de Blair” parte de la aventura que viven tres
adolescentes que se adentran en un bosque para grabar un documental. Ya al
principio nos advierten de que ese material audiovisual ha sido encontrado
tirado tras la evidente desaparición de los chavales - dos chicos y una chica-.
A mí
esta forma de grabar me marea bastante, incluso hay momentos en que me duele la vista, pero he de reconocer que en
ciertas escenas la intensidad es mayúscula. ¿Por qué? Pues porque realmente
eres uno más de los que se han perdido en el bosque. No ves ni más ni menos. No
es como las películas de terror clásicas en las que observas cómo el monstruo
acecha a la pobre chica y te dan ganas de gritar a ver si espabila. En esta
película, te enteras de lo que hay cuando uno de ellos lo dice, mueve la cámara
y enfoca algún objeto, zona del bosque o aparece cualquier otro plano que arroje
algo de luz. En realidad, ellos son los que te trasmiten el estrés y el pánico.
La película da miedo en tanto en cuanto empatices con su situación.
Si no habéis visto
la película, voy a contar más cosas en plan Spoiler.
La
leyenda de la Bruja al principio se plantea como algo esotérico y costumbrista
de una región alejada de la ciudad. Pero el guion encamina la historia hacia un
perturbado que, en su día, asesinó a varios niños. Una leyenda oscura que
aterroriza a los lugareños. Esta historia contada de padres a hijos será la
fundamental, puesto que, cuando la película se dirige hacia el final, los
chicos -que previamente se han perdido durante varias noche en el bosque y
nadie sabe cómo han terminado ahí- llegarán
a una casa en ruinas donde el misterio se cruza con lo espeluznante. La cinta
culmina con un primer plano borroso del suelo. Aquí se acaba la grabación y, por lo tanto, el film.
Yo me cagué un poco cuando la vi por primera vez. No sabía mucho lo que iba a encontrarme y me dio bastante mal rollo xD
ResponderEliminarCierto, la verdad es que al principio, sobre todo en las escenas dentro de la tienda de campaña, se pasa realmente miedo.
ResponderEliminarMuchas gracias por el comentario y ¡un saludo!