Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como bukowski

Especial Chales Bukowski (vídeo)

A nalizo la novela de Charles Bukowski "La senda del Perdedor". También comento algo de su obra poética.

"La senda del perdedor" de Charles Bukowski

Bukowski (1922-1994), uno de los grandes exponentes del realismo sucio, fue, desde que lo conocí hace más de veinte años, uno de esos escritores que provocaba en mí una fuerte catarsis. En cada una de sus páginas nos sumergimos en un mundo sórdido plagado de perdedores. Mi libro favorito de este escritor norteamericano es, sin lugar a dudas, “La senda del perdedor”.  En esta novela, Henry Chinasky, alter ego de Bukowski, relata una primera etapa de su vida, desde su infancia hasta su primer empleo. Entendemos que es, a todas luces, una biografía detallada de la vida del escritor. Hijo de un padre maleducado que considera que nadie tiene ambición menos él y de una madre sufrida que siempre se posiciona a favor de su marido, Chinaski recibe tremendas palizas -la madre también - desde muy pequeño. Aunque viven en una zona humilde de Los Ángeles, sus padres pretenden comportarse como ricos y creen que, con solo imaginarlo, la realidad se ve directamente transformada. Por ese motivo, n...

REALISMO SUCIO

Hace algunos años ya, saltándome las habituales clases de la universidad, me paseé por la antigua, y ya cerrada, librería Urbano en Granada. Deambulando por los pasillos me topé con un libro increíble de un escritor que me ha interesado desde entonces. El título en cuestión era “La senda del perdedor”, del escritor norteamericano de origen alemán Charles Bukowski (1920-1994). Fue como un puñetazo en el estómago, dinamita pura para las buenas conciencias del sueño americano, un vómito en toda la cara de los bienpensantes. Considerado símbolo del “realismo sucio”, alcohólico, amante de las carreras de caballos, te hace estremecerte o reírte, emocionarte o volverte un cínico. Su infancia fue dura, debido al maltrato y a una enfermedad que le deformó la cara y que describe en “La senda del perdedor” con una sequedad cortante. Estuvo marcado de por vida y separar su vida de su obra es ya difícil. Vinieron muchos libros más que devoré con ansia liberadora: “Música de Cañerías”, “Mujeres”, ...