Hoy he decidido traer al sótano al poeta Oliverio
Girondo (Buenos Aires, 17 de agosto de 1891 - Buenos Aires, 24 de enero de 1967). No lo conocía mucho hasta hace unos días en
los que, gracias a una serie de páginas literarias que sigo, pude descubrir
algunos de sus poemas. Para saber más de
él, os dejo el enlace de Wikipedia.
A continuación, algunos de sus poemas.
"No soy quien escucha
ese
trote llovido que atraviesa mis venas.
No soy quien se pasa la lengua entre los
labios,
al
sentir que la boca se me llena de arena.
No soy quien espera,
enredado en mis nervios,
que
las horas me acerquen el alivio del sueño,
ni el
que está con mis manos, de yeso enloquecido,
mirando, entre mis huesos, las áridas paredes.
No soy yo quien escribe estas palabras
huérfanas".
“Yo no sé nada
Tú no sabes nada
Ud. no sabe nada
El no sabe nada
Ellos no saben
nada
Ellas no saben nada
Uds. no saben nada
Nosotros no
sabemos nada
La desorientación
de mi generación tiene su expli-
cación en la
dirección de nuestra educación,cuya
idealización de la
acción, era - ¡sin discusión!-
una mistificación,
en contradicción
con nuestra propensión
a la me-
ditación, a la
contemplación y
a la masturbación.
(Gutural,
lo más
guturalmente que
se pueda.) Creo
que
creo en lo que
creo
que no creo. Y
creo
que no creo en lo
que creo que creo
«C a n t a r d e l
a s r a n as»
¡Y ¡Y
¿A ¿A ¡Y
¡Y
su ba
llí llá su
ba
bo jo es es bo jo
las las tá? tá? las las
es es ¡A
¡A es es
ca ca quí cá ca ca
le le no no le le
ras ras es es ras ras
arri aba
tá
tá arri aba
ba!... jo!...
!...
!... ba!... jo!...”
Te encontré por casualidad, me agrada tu blog.
ResponderEliminarGracias por tu generosidad.
Muchas gracias por el comentario, Alicia. Un saludo.
ResponderEliminarEs un blog precioso y muy interesante, y como el tema esla poesia te dejo uno que para mi tiene gran valor sentimental. A mi abuelo....Aveces guardamos recuerdos, y sensibles emociones, que llenan los corazones, de alegria y consuelo.Hay seres que son brillantes y dejan profundas huellas, a veces conocimiento o ratos emocionantes.Recuerdo que se sentaba en la esquina de la mesa, siempre con su libreta, al lado de un buen libro,sus gafas a media nariz, y sus ganas de reir, si acaso le preguntaba...que estas haciendo abuelo...-siempre me haces la misma pregunta, ay cielo, -la curiosidad mato al gato, pero sientate, sientate un rato, que te contare un gran cuento, o tal vez un relato.Poseia unos libreros de valor incalculable, para n lector insaciable, no sabiendo que escoger, lo mismo podias ver, a Cervantes, Unamuno, Machado, te inclinabas hacia un lado, alli estabanValle Inclan, Quiroga, Ruben Dario, despues de un estante vacio, un estante mas grande, Edgar Allan Poe, Agatha Cristhie, Walt Withman, macanica nacional, obras completas de Marti, Onelio Jorge Cardoso, cuanto gozo, yo me quedaba sombrada, porque nada escapaba,a tanta curiosidad, Carpentier, Hemingway, Athur Conan Doyle, Victor Hugo, y la mirada subo, y mi meoria recuerda a , Alejandro Dumas, Oscar Wilde y a Lope de Vega. Recuerdo en una ocacion, por pura curiosidad, le pregunte intrigada......de verdad, abuelo, has leido todos esos libros...-todos no, pero trato cada dia, tener una ocupacion, y aprendo precisamente, QUE NADA LIMITA LA RAZON.y luego le dije....abuelo por ejemplo, si yo te preguntara, por Alfieri.-decirte que no sabria, quizas lo intentara, y si tu pregunta contestara, te diria....Que fue un poeta de extraordinarias cualidades, de dificles realidades, pues trato de envenenarse, asi su vida quitarse, aunque no lo consiguio.Desdichado en el amor, siempre guardaba el temor, de sentirse rechazado, vivio gracias a que un criado, su vida le salvo, y asi luego tanto estudio, y viviendo en soledad, con gran majestuosidad, empezo a escribir versos, aunque es gran genio, escribiera Cleopatra, su gran sensibilidad y arrebatos e tristeza, le dieron la gran firmeza, para poder componer, varias tragedias a la vez. Mas, no suelo entender, decia, por que siempre los poetas, llevan una vida inquieta, sensible y apasionada, pero un alma desdichada, llena de mucha tristeza.No pretendo impresionar, tampoco sensibilizar, solo narro mis recuerdos, con orgullo y alegria, y siento que en el alma mia, esta su recuerdo imborrable, lo siento, es inevitable, lo digo on gran orgulloque el mio...no era como el tuyo, ni como el de aquel, solo era el, en su esquina de la mesa, con su tremenda nobleza, leyendo pacientemente, como hombre inteligente, insaciable en el saber.
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